Cáncer de próstata

El CaP es el cáncer más frecuente en hombres en España1,2

En sus fases iniciales, el CaP es asintomático en la mayoría de los casos. En estadios más avanzados, los síntomas pueden incluir:1

Fatiga

Anemia

Eventos relacionados con el esqueleto como dolor, fracturas o comprensión medular

Insuficiencia renal debido a obstrucción ureteral bilateral.

PSA y testosterona: claves en la comprensión del CaP

El antígeno prostático específico (PSA) es una proteína producida por la próstata que se encarga de disminuir la viscosidad del semen mediante la degradación de proteínas específicas, facilitando así la movilidad espermática y la fertilidad.5

El PSA es un marcador tumoral de CaP altamente sensible pero relativamente poco específica e imprecisa, ya que tanto las condiciones benignas como las malignas pueden elevar este marcador sérico.5
El PSA es específico del órgano, pero no del cáncer; por lo tanto, también puede estar elevado en la HBP, la prostatitis y otras afecciones no malignas.4
Sin embargo, la determinación del PSA ha revolucionado el diagnóstico del CaP, constituyendo una de las pruebas fundamentales.1,4,5 Niveles altos de PSA son un gran indicativo de CaP, aunque algunos hombres pueden padecer CaP aun teniendo bajos niveles de PSA.4 En el cribado del CaP, el umbral más frecuentemente usado es PSA ≥ 3 ng/ml.4

Riesgo del CaP identificado mediante biopsia sistémica de PCa en relación con valores bajos de antígeno prostático específico4

Nivel de PSA (ng/mL) Riesgo de CaP (%) Riesgo de CaP ISUP grado ≥ 2 (%)
0,0-0,5
6,6
0,8
0,6-1,0
10,1
1,0
1,1-2,0
17,0
2,0
2,1-3,0
23,9
4,6
3,1-4,0
26,9
6,7

Extraído de Mottet N, et al. EAU-EANM-ESTRO-ESUR-ISUP-SIOG Guidelines on Prostate Cancer. 2025.4

El PSA junto con los estadios clínicos y la puntuación de Gleason en la biopsia son los principales parámetros utilizados para estratificar a los pacientes en categorías de riesgo durante la evaluación inicial, aunque con una especificidad y sensibilidad modestas, y se emplean para decidir la terapia más apropiada.6

Bajo riesgo PSA < 10 ng/mL

Riesgo intermedio PSA 10 – 20 ng/mL

Alto riesgo PSA > 20 ng/mL

Siguiendo las directrices de la EAU, es preciso indicar que la decisión sobre el abordaje terapéutico del CaP —sea este farmacológico (como la supresión de testosterona), quirúrgico, radioterápico o la vigilancia activa— se fundamenta en la clasificación clínica del tumor y la estratificación del riesgo.4

La testosterona es una hormona androgénica que juega un papel fundamental en el desarrollo y salud masculina.7 En hombres sanos, los andrógenos testosterona y su derivado dihidrotestosterona son esenciales para la supervivencia celular y la función de la próstata. Sin embargo, las células del CaP exhiben una activación excesiva de la vía de señalización androgénica, lo que resulta en una proliferación incontrolada de las células tumorales.8

La testosterona es un factor clave en la patogenia del CaP, por ello, la terapia de deprivación androgénica (TDA) es actualmente el eje central del tratamiento.9
El mantenimiento de los niveles bajos de testosterona se asocia a una reducción del riesgo de muerte y progresión de la enfermedad9
Aunque el nivel de castración < 50 ng/dl se estableció hace más de 40 años, con el aumento de la sensibilidad de las pruebas, se ha definido un nivel más apropiado de < 20 ng/dl (<0,7 nmol/l), ya que se observan repetidamente mejores resultados con niveles de testosterona más bajos en comparación con 50 ng/dl2.4

TDA: agonistas de la LHRH

El descubrimiento inicial de que las hormonas modulan el tamaño y la función de la glándula prostática, junto con la observación de que el crecimiento del CaP está influenciado por la producción de andrógenos, proporcionó la base para la TDA.8
La TDA sigue siendo el tratamiento fundamental del CaP avanzado, siendo su objetivo principal reducir los niveles circulantes de andrógenos.8 Asimismo, los análogos de la LHRH continúan siendo una de las opciones terapéuticas más usadas para la TDA en el tratamiento del CaP hasta la fecha.10
En 1984, se aprobaron los primeros análogos de LHRH para uso comercial en CaP: buserelina y leuprolida.10
Los agonistas actúan sobre el receptor del LHRH en la hipófisis. Estimulan el receptor y generan un aumento transitorio en la liberación de LH y testosterona, seguido de una regulación a la baja del receptor durante 2-3 semanas, con reducción de LH y la consiguiente supresión de la producción de testosterona por los testículos.8,9
Extraído de Merseburger AS, Roesch C. Expert Rev Anticancer Ther. 2022.9
Actualmente, existen diferentes agonistas de LHRH con una gran variedad de tecnologías de liberación para alcanzar una liberación continua y controlada del fármaco.8

Adherencia y retrasos en la administración de los agonistas de LHRH

La adherencia al tratamiento es importante para mantener la supresión de testosterona y evitar el fracaso terapéutico.11,12
Determinados factores pueden afectar negativamente a la adherencia a la terapia oral:11
  • Edad avanzada
  • Mayor fragilidad
  • Comorbilidades
  • Ingresos bajos
  • Olvidos
  • Estadio temprano
  • Intolerancia o toxicidad
  • Medicación concomitante
  • Falta de respuesta al tratamiento o bajo control sintomático
  • Aumento de dosis (número de comprimidos al dia)
  • Complejidad del régimen
  • Coste
Por eso, una menor frecuencia de administración permite al especialista tener un mayor control sobre el TDA y disminuir el riesgo de no adherencia.12
La administración semestral (cada 6 meses) presenta diversas ventajas:12
La combinación de eficacia, seguridad y comodidad que ofrecen las formulaciones semestrales pueden convertirlas en la opción preferida por médicos y pacientes.12
Por otro lado, los retrasos en la inyección del TDA impactan en la supresión de la testosterona, pudiendo alcanzar unos valores >20 ng/dL en casi la mitad de los pacientes. Además, estos retrasos aumentan el riesgo de sufrir escapes de testosterona.16
Un 27% de las inyecciones de TDA se administraron tarde en el análisis mensual extendido de 22.860 pacientes con CaP.*16
Un retraso en el esquema de inyección del TDA aumenta el riesgo de restauración de la función del eje hipotálamo-hipófisis-gonadal, con el consiguiente aumento de testosterona, así como el riesgo de escapes agudos/crónicos de testosterona en las inyecciones subsecuentes.16,17

*En práctica clínica (n=22.860 pacientes), el 84% de las inyecciones de TDA se administraron tarde en el análisis mensual estricto (teniendo en cuenta un periodo de 28 días), y el 27% se administró tarde en el análisis extendido donde se ampliaba ese periodo a 4 días extra por mes.16

ABREVIATURAS:
CaP
: cáncer de próstata; HBP: hiperplasia benigna de próstata; LH: gonadotropina; LHRH: hormona liberadora de gonadotropina; PSA: antígeno prostático específico; TDA: terapia de deprivación androgénica.

REFERENCIAS:

  1. Correa R, et al. Manejo de los pacientes con cáncer de próstata localizado y recurrencia bioquímica en España: encuesta médica. Actas Urológicas Españolas. 2024;48:218-227.
  2. Cifras del cáncer en España 2025. Disponible en: https://seom.org/images/LAS_CIFRAS_DMC2025.pdf [Último acceso: abril 2025].
  3. Darbà J, Ascanio M. Prostate cancer in Spain: A retrospective database analysis of hospital incidence and the direct medical costs. PLoS ONE. 2024;19(3): e0298764.
  4. Mottet N, et al. EAU-EANM-ESTRO-ESUR-ISUP-SIOG Guidelines on Prostate Cancer. 2025. Disponible en: https://d56bochluxqnz.cloudfront.net/documents/full-guideline/EAU-EANM-ESTRO-ESUR-ISUP-SIOG-Guidelines-on-Prostate-Cancer-2025_2025-03-24-120144_rinw.pdf [Último acceso: abril 2025].
  5. David MK, Leslie SW. Prostate-Specific Antigen. StatPearls [Internet]. 2024.
  6. Tzelepi V. Prostate Cancer: Pathophysiology, Pathology and Therapy. Cancers. 2023;15:281.
  7. Michaud JE, et al. Testosterone and prostate cancer: an evidence-based review of pathogenesis and oncologic risk. Ther Adv Urol. 2015;7(6):378-87.
  8. Crawford ED, et al. Androgen-targeted therapy in men with prostate cancer: evolving practice and future considerations. Prostate Cancer and Prostatic Diseases. 2019; 22:24–38.
  9. Merseburger AS, Roesch C. Advanced delivery of leuprorelin acetate for the treatment of prostatic cancer. Expert Rev Anticancer Ther. 2022;22(7):703-715.
  10. Lehtonen M, et al. The past and present of prostate cancer and its treatment and diagnostics: A historical review. SAGE Open Medicine. 2023. 
  11. Fleshner NE, et al. Adherence to oral hormonal therapy in advanced prostate cancer: a scoping review. Ther Adv Med Oncol. 2023;15:1-22.
  12. Hafron J, et al. 6-month Formulations of Androgen Deprivation Therapy for Advanced Prostate Cancer: Effectiveness and Rationale for Extended Dosing. The Open Urology & Nephrolofy Journal. 2024;17:1-8.
  13. Higano CS, et al. Adherence With Oral Anticancer Therapies: Clinical Trial vs Real-world Experiences With a Focus on Prostate Cancer. J Urol 2023;209(3):485–493.
  14. Grundmark B, et al. Anti-androgen prescribing patterns, patient treatment adherence and influencing factors; results from the nationwide PCBaSe Sweden. Eur J Clin Pharmacol.2012;68(12):1619-30.
  15. Schulman C. Assessing the attitudes to prostate cancer treatment among European male patients. BJU Int. 2007;100(Suppl 1):6-11.
  16. Crawford ED, et al. The Impact of Late Luteinizing Hormone-Releasing Hormone Agonist Dosing on Testosterone Suppression in Patients with Prostate Cancer: An Analysis of United States Clinical Data. J Urol. 2020;203(4):743-750.
  17. Crawford ED, et al. Impact of Late Dosing on Testosterone Suppression with 2 Different Leuprolide Acetate Formulations: In Situ Gel and Microsphere. An Analysis of United States Clinical Data. J Urol. 2021;205:554–560.